Cualquier persona que haya fundado una empresa seguramente escuchó el dicho:
“Iiciar un negocio no es una carrera de velocidad, sino un maratón”.
Pero, en realidad, la comparación no le hace justicia al espíritu emprendedor. Un maratón tiene un punto final, un lugar al que sabes que puedes llegar y descansar una vez que lo logras. Por otro lado, un negocio… no tiene fin (si es que tienes suerte).
Sin embargo, un maratón sí tiene algo en común con el mundo de los negocios: si no cuentas con la preparación adecuada, sin duda fracasarás. Lesiones por correr, empleados que se van sin avisar. Fracturas por estrés, estrés por el dinero. Incluso ambos te provoquen vómito.
La pasión y adrenalina te ayudarán, hasta cierto punto. Muchos emprendedores llegan a la línea de salida sin siquiera haber calentado antes, probablemente ellos no pasen de la marca del primer kilómetro.
Los dueños de negocio con más experiencia y algunos expertos coinciden: antes de iniciar la carrera, debes entrenar. Por eso, aquí una guía para orientarte paso a paso.
1. Entrena en tus horas libres
¿Alguna vez te han dicho “no dejes tu trabajo actual’? Es en serio, no renuncies todavía. Los negocios nuevos a menudo parecen prometedores y llenos de potencial, aunque casi nunca te darán los ingresos que necesitas para vivir de manera inmediata.
“En muchas ocasiones hemos escuchado a personas que dicen: ‘empezamos a crecer, por lo que todos dejamos nuestros empleos y nos dedicamos de lleno a la empresa’”, comenta Duncan Logan, director general del RocketSpace, espacio de coworking en San Francisco, EE.UU. “Sin embargo, una vez que el mercado se estabiliza se dan cuenta que cometieron un gran error, ya que todavía no se trataba de un negocio rentable, sino de un hobby”, explica.
El consejo de Logan es: la mejor manera de prepararte para iniciar tu empresa es manejarla como un proyecto aparte de tu trabajo actual durante el mayor tiempo posible. Por supuesto, esto implicará que estarás lidiando con dos obligaciones a la vez y posiblemente siempre estés ocupado; de cualquier manera eso será un buen entrenamiento para cuando tu propio negocio comience a crecer y se adueñe de tu vida.
También es clave tener presente que seguramente estarás construyendo tu negocio con el salario de tu trabajo actual, cuídalo. Ojo: si estás muy distraído y no prestas atención, te despedirán.
2. Ten razones claras
¿Sabes por qué lo estás haciendo? Si no tienes una buena respuesta, detente en este momento. No empieces hasta que lo hayas resuelto.
“Cuando tienes que tomar una decisión y no sabes cuál es la respuesta correcta desde un punto de vista financiero o de acción, debes poder respaldarte en tus valores”, asegura Blake Smith, director general de la empresa Cladwell, un servicio de asesoría de imagen personal en línea con sede en Cincinnati, EE.UU.
“Cuando tienes que tomar una decisión y no sabes cuál es la respuesta correcta desde un punto de vista financiero o de acción, debes poder respaldarte en tus valores”
Cuando el emprendedor apenas iniciaba se dio cuenta que nunca había definido sus valores con claridad. “En lugar de puntualizarlos yo mismo, había preguntado a otras personas lo que pensaban. Esto hizo que mi negocio no estuviera fundamentado”.
Eventualmente, explica, entendió su razón de ser. La base de su negocio era la autenticidad y el deseo de hacer que la industria de la moda fuera más transparente. Ese se convirtió en su eje y cada decisión que tomaba se basaba en sus ideales. “Debes guiarte con tus propios valores”, agrega. Por lo tanto, determina los tuyos desde el principio.
3. Ten todo por escrito
El plan de negocios debe estar redactado.
Antes era parte fundamental al momento de iniciar. Pero últimamente los emprendedores lo descartan sin pensarlo dos veces, de acuerdo con Donald F. Kuratko, ejecutivo y director académico del Centro de Emprendimiento e Innovación Johnson, en la Escuela de Negocios Kelley de la Universidad de Indiana, EE.UU. Muchos llegan a decir que un plan de negocios es anticuado poco efectivo a la hora de ponerlo en práctica.
Error, asegura Kuratko. Sin importar el negocio o la industria, todos los emprendedores necesitan estudiar los problemas del mercado al que quieren entrar. Eso implica conocerlo y desarrollar estrategias concretas sobre cómo planean conseguir a su primer cliente. No hay lugar para la improvisación.
4. Toma tus puntos de referencia en serio
No comienzas a entrenar para un maratón de 42 kilómetros. Debes plantearte metas más modestas, empezar con pocos kilómetros e ir incrementando poco a poco. El mismo principio cuando estás sentado detrás de tu escritorio.
El primer paso es plantear tus objetivos intermedios para asegurarte de que crecerás de manera oportuna (ya sabes, antes de que se te acabe el dinero). Tus metas pueden ser trimestrales, semestrales e incluso anuales. No importa siempre y cuando tengas una visión clara de que el éxito es para ti y seas realista al determinar si lo estás consiguiendo o no.
Esa es la parte fácil. Ahora debes implementarlo.
Duncan Logan, director general de RocketSpace, es un ejemplo de qué es lo que pasa si ignoras tus puntos de referencia. Cuando inició su negocio anterior, determinó ciertos obstáculos que debía vencer en su primer año; sino lo lograba, cerraría su empresa. Cuando no concretó sus propósitos en lugar de hacer algo al respecto, comenzó a inventar a excusas. Planteó nuevas metas y se dio otros seis meses para alcanzarlas. No llegó a esas tampoco. Al final, arrastró a su compañía a dos años terribles y terminó cerrándola. Pudo ahorrarse mucho tiempo si hubiera aceptado desde antes que no estaba funcionando.
5. Rodéate de personas clave
Un entrenador deportivo será quien más te apoye, hasta el momento en el que es evidente que no podrás cruzar la meta. Cuando estás cayendo, un buen entrenador te dirá que es mejor que abandones la carrera antes de que te lastimes. Ahora, debes encontrar a un buen coach de negocios.
Duncan recomienda crear un “círculo de confianza”, con dos o tres individuos que puedan ser brutalmente honestos contigo y, sobre todo, te den retroalimentación crítica acerca de tu negocio. Son pocas las personas que serán capaces de hacer esto una vez que tu empresa esté operando, pues saben el esfuerzo que representa para ti. Por ello, debes formar este grupo desde antes de arrancar.
“Puede ser que duela, pero es necesario que alguien (oportunamente) te diga: ‘tu bebé es feo. Sabemos que lo amas, pero no está funcionando’”, opina Duncan.
“Puede ser que duela, pero es necesario que alguien (oportunamente) te diga: ‘tu bebé es feo. Sabemos que lo amas, pero no está funcionando’”
6. Prepara tu vida personal
Al igual que cuando entrenas para un maratón, las horas que pasas fuera de casa al iniciar un negocio pueden desbalancear tu vida y generar resentimiento entre la gente que te quiere.
Sin embargo, Scott Bailey, director administrativo de la aceleradora de startups MassChallenge, con sede en Boston, EE.UU., te tiene buenas noticias al respecto: está bien, de hecho es importante, dejar el trabajo para pasar tiempo de calidad con tu familia.
¿Cómo? Marca límites desde el inicio. Debes hablar con tu familia sobre lo que realmente les importa. Tal vez esto implique que ayudes con las tareas del hogar, que pases tiempo con tus hijos, que no estés revisando tu teléfono cuando están cenando o que no pases las vacaciones en frente de la computadora (a medida que te sea posible).
Si respetas estos acuerdos, tu familia se sentirá apreciada. Puede ser que estés ocupado; sin embargo sabrán que son importantes para ti.
7. Delimita tu presupuesto en casa
Cuando estás entrenando para un maratón, dejas de comer pizza y tomar cerveza. Cuando te preparas para emprender, pues, puede ser que optes por pizza y cerveza más barata. La lógica es la misma, debes de tener cuidado con lo que comes: menos comida chatarra para el maratón, menos comida costosa para ajustar tu presupuesto.
Tu negocio puede afectar tus finanzas, lo cual posiblemente cause conflicto en tus relaciones. Por ello, antes de lanzar tu empresa, debes hacer cuentas e incluir tus gastos personales para así determinar cuánto puedes gastar y en qué.
8. Encuentra a tu gente
Como un grupo de corredores que entrenan juntos, una comunidad de emprendedores puede ayudarte a mantener tu paso.
Las incubadoras, aceleradoras y otros centros de emprendimiento pueden darte acceso a networking. Únete a ellos. Ponte en contacto con otros emprendedores en situaciones similares a la tuya e intenta formar vínculos con personas con más experiencia que tú, que puedan servirte como mentores.
Fuente: entrepreneur
No hay comentarios:
Publicar un comentario